En nuestra ciudad, dadas las lluvias que han caído, se han provocado enfermedades que afectan a toda la población.Gripes, enfermedades respiratorias, digestivas e infectocontagiosas, que alteran nuestros hábitos diarios.
El DENGUE es una enfermedad infectocontagiosa grave, ocasionada por  un virus, trasmitida  por un mosquito (llamado vector), que al picar a las  personas,  provocan brotes epidémicos en la población.
El depósito de sus huevos lo  hace en  recipientes que contengan agua "limpia" (floreros,  portamacetas,  latas, botellas, tambores, cubiertas usadas con agua de  lluvia) y así depositar  sus huevos próximos a la superficie, los que  adheridos a la parte interna de  los recipientes artificiales o  naturales, forman verdaderos criaderos. Los  huevos eclosionan en 2 o 3  días convirtiéndose en larvas en condiciones  favorables de temperatura y  humedad. Los huevos constituyen la fase de resistencia  del ciclo, dado  que pueden mantener vivo el embrión hasta un año. Por lo general El Aedes aegypti  vive unas pocas semanas, no superando el mes. Su capacidad  de vuelo es  de aproximadamente 100 metros, por lo que el mosquito que pica es  el  mismo que se ha “criado” dentro de la vivienda.
Pueden existir tres  manifestaciones diferentes de la enfermedad: fiebre de dengue, fiebre  hemorrágica de dengue y el shock hemorrágico. 
La fiebre de dengue  es una grave enfermedad de tipo gripal que afecta a los  niños mayores y  a los adultos, pero rara vez causa la muerte.En  cambio, la fiebre hemorrágica de dengue (FHD) es otra forma más grave,  en la que pueden sobrevenir hemorragias y a veces un estado de shock,   que puede llevar  a la muerte. En los niños es sumamente grave y el  sólo el diagnóstico precoz,  seguido del oportuno tratamiento puede  prevenir la muerte. Los síntomas de la  fiebre de dengue varían según la  edad y el estado general de salud del  paciente. Los lactantes y los  niños pequeños pueden presentar un cuadro de  fiebre y erupción parecida  al sarampión, pero difícil de diferenciar de un  estado gripal, una  enfermedad eruptiva, el paludismo, la hepatitis infecciosa y  otras  enfermedades febriles. Los niños mayores y los adultos pueden tener   síntomas análogos o un cuadro sintomático variable entre leve y  gravísimo.
Características  de la fiebre de dengue: Las  manifestaciones clínicas dependen de la  edad del paciente. Los  lactantes y preescolares pueden sufrir una enfermedad  febril  indiferenciada con aparición de un brote de manchas rojizas en la piel.  En  los niños mayores y los adultos el cuadro puede variar desde una  enfermedad  febril leve acompañada de dolores musculares (especialmente  dorsales) y  ausencia de síntomas respiratorios, a la forma clásica de  inicio abrupto. A los  pocos días cede la fiebre y puede aparecer una  erupción generalizada, en forma  de manchas rojizas en el pecho, que  luego se extiende a la cara, brazos y  piernas. La enfermedad cursa con  gran decaimiento que obliga al paciente a  estar en reposo aún pasado el  cuadro febril. Resumiendo, los síntomas más  comunes son: 
- Fiebre alta.
- Dolor de cabeza en la zona frontal.
- Dolor detrás de los ojos que se exacerba con los movimientos oculares.
- Dolores musculares y articulares ( "fiebre quebrantahuesos”)
- Inapetencia y dificultades en el sentido del gusto.
- Erupción de máculas o pápulas en tórax y miembros inferiores.
- Aparición de náuseas y vómitos.
 

 
 





